Desde el lunes pasado, se han cumplido tres días desde que se detuvo la exportación de aguacate michoacano hacia Estados Unidos. La suspensión fue resultado de un incidente donde dos inspectores del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) fueron retenidos por comuneros en la Meseta Purépecha. Esta medida drástica se tomó luego de que los comuneros bloquearon carreteras en apoyo a manifestaciones policiales en Morelia, Michoacán, exacerbando tensiones que ya habían llevado a suspensiones similares en el pasado, como ocurrió en febrero de 2022.
El viernes anterior, los comuneros interceptaron y agredieron a los inspectores de sanidad de la USDA, lo que llevó a la suspensión inmediata de todas las operaciones de exportación de aguacate. Hasta hoy, la situación continúa sin cambios significativos, a pesar de los esfuerzos del gobierno estatal para negociar el levantamiento de los bloqueos y restaurar la normalidad en las exportaciones. El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, ha asegurado que están en constante comunicación con la embajada de Estados Unidos para resolver este impasse.
México es reconocido como el principal productor y exportador mundial de aguacate, con una gran parte destinada al mercado estadounidense, especialmente durante eventos como el Super Bowl, donde la demanda aumenta considerablemente. En 2020, México exportó más de un millón de toneladas de aguacate a Estados Unidos, con un valor comercial significativo que ronda los 2.579 millones de dólares anuales.
La incertidumbre actual plantea desafíos tanto para los productores como para los consumidores en ambos lados de la frontera, destacando la importancia de resolver rápidamente las tensiones para restablecer el flujo normal de este «oro verde» hacia el mercado estadounidense.