Moscú busca ampliar su respaldo para su intervención en Ucrania, mientras que Beijing enfrenta el desafío de mantener su relación con Europa, un socio comercial vital para su economía en recuperación. La próxima reunión entre Xi Jinping y Vladimir Putin marca un hito en su asociación «sin límites», forjada hace más de dos años para contrarrestar la supuesta interferencia occidental.
Sin embargo, las tensiones actuales plantean desafíos significativos. Xi enfrenta una delicada situación, ya que el respaldo a Putin podría alienar a Europa, lo que China necesita para revitalizar su economía. Mientras tanto, la presión internacional sobre China para distanciarse de Rusia aumenta, lo que complica aún más el equilibrio diplomático de Xi.
Shen Dingli, experto en relaciones internacionales con sede en Shanghai, describe este equilibrio como un desafío complejo y delicado para China, que busca mantener relaciones sólidas tanto con Rusia como con Occidente.
Por su parte, el Sr. Putin podría estar poniendo a prueba el apetito por el riesgo del Sr. Xi, mientras intenta disuadir a las naciones occidentales de apoyar más activamente a Ucrania. La semana pasada, mientras el Sr. Xi estaba en Francia reuniéndose con el Presidente Emmanuel Macron, el Sr. Putin ordenó ejercicios para el uso de armas nucleares tácticas. Esta acción fue vista como la advertencia más explícita hasta el momento de que Rusia podría potencialmente usar armas nucleares tácticas en el campo de batalla en la guerra, algo contra lo que el Sr. Xi ha marcado claramente una línea. Es probable que el líder ruso también presione al Sr. Xi para obtener más apoyo y así so