El aumento de la violencia y la expansión del crimen organizado han marcado la administración de Andrés Manuel López Obrador, según un artículo del Financial Times que recoge opiniones de expertos y detalla los hechos violentos del sexenio. Aunque la delincuencia no es nueva en México, el artículo destaca que la situación ha empeorado bajo el actual gobierno, con cárteles controlando un tercio del país y extendiendo sus actividades ilegales por toda América del Sur, desafiando a gobiernos y alarmando a ciudadanos.
Las batallas entre el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el Cártel de Sinaloa, por ejemplo, han hecho de Ecuador uno de los países más violentos del mundo. El presidente ha defendido su gestión culpando a sus predecesores, pero críticos como Falko Ernst de Crisis Group sostienen que sus políticas han permitido que los criminales ganen terreno dentro de las instituciones.
El Financial Times critica gestos del presidente como pedir a los cárteles que «piensen en sus madres» y saludar a la madre de Joaquín «El Chapo» Guzmán. La política de «abrazos, no balazos» ha facilitado la expansión de los grupos criminales, resultando en una campaña electoral extremadamente violenta.
El artículo concluye mencionando a la candidata presidencial Claudia Sheinbaum, quien planea continuar la estrategia de evitar confrontaciones directas con el crimen organizado, dejando en el aire la pregunta sobre si el próximo líder de México podrá hacer una diferencia significativa en la lucha contra la violencia y el crimen.
