Durante los últimos dos meses, se ha registrado una disminución de al menos el 50 por ciento en el flujo migratorio hacia Estados Unidos, en comparación con los niveles observados hace seis meses, según informó Enrique Valenzuela, coordinador general del Consejo Estatal de Población (Coespo).
Este descenso se ha reflejado en la ocupación de los albergues en Ciudad Juárez, los cuales anteriormente albergaban hasta 500 personas diarias. Actualmente, estos albergues operan a aproximadamente el 50 por ciento de su capacidad, con alrededor de mil 500 personas en situación de movilidad, en comparación con la capacidad total instalada para recibir a tres mil 500 personas.
Valenzuela indicó que esta reducción en la ocupación podría deberse a varios factores, como ajustes en las políticas migratorias de Estados Unidos y México, así como cambios estacionales que afectan el flujo de personas.
Por otro lado, Óscar Ibáñez, representante de la gobernadora, destacó que la disminución en el número de migrantes que llegan a los albergues de Ciudad Juárez podría estar relacionada con las nuevas políticas migratorias implementadas por ambos países. Estas políticas incluyen medidas de control más estrictas en la frontera, así como programas de asistencia y regulación diseñados para gestionar el flujo migratorio de manera más eficiente.
Además, se mencionó que las condiciones estacionales y otros factores externos podrían estar contribuyendo a la disminución de la migración. Ibáñez señaló que los cambios en el flujo migratorio a menudo están vinculados a decisiones políticas y condiciones climáticas, lo que podría explicar en parte la reducción actual.
Los albergues en Ciudad Juárez incluyen diversas instalaciones, desde centros operados por organizaciones religiosas hasta centros habilitados por el Municipio y otras organizaciones no gubernamentales. Estos sitios ofrecen refugio y apoyo a los migrantes, y la capacidad instalada permite una recepción flexible para adaptarse a los cambios en el número de personas que necesitan asistencia.Sin embargo, el proceso de entrada legal a Estados Unidos ha enfrentado desafíos, especialmente en relación con la aplicación del Customs and Border Protection (CBP). Esta aplicación, diseñada para gestionar las solicitudes de entrada y facilitar el proceso de regularización, ha sido criticada debido a problemas en su funcionamiento. Muchos migrantes han reportado dificultades para contactar a los servicios de soporte y enfrentar largos tiempos de espera para obtener citas, según informó Valenzuela.