El gobierno argentino anunció un régimen especial para ayudar a miles de venezolanos con documentos vencidos, afectados por el cierre del consulado de Venezuela en Buenos Aires. La nueva normativa flexibiliza los requisitos de entrada y regularización migratoria, permitiendo que los venezolanos ingresen al país con su cédula o pasaporte vencido por hasta 10 años. Los niños menores de 9 años podrán entrar con su partida de nacimiento.
Este régimen especial estará vigente por 90 días y también permitirá a aquellos sin documentos acreditar su identidad mediante una declaración jurada. La medida busca solucionar el «limbo migratorio» que afecta a más de 10.000 venezolanos en Argentina, especialmente tras el cierre de la embajada venezolana y la derogación de una normativa previa.
La decisión ha sido impulsada por activistas como Elisa Trotta y organizaciones como Alianza por Venezuela. Además, la Dirección Nacional de Migraciones subrayó la vulnerabilidad de los venezolanos que huyen de su país sin documentos debido a la crisis que atraviesan.
Argentina, con unos 164.000 venezolanos, sigue siendo uno de los destinos de esta migración en Sudamérica, aunque enfrenta una crisis económica que dificulta su acogida. A pesar de las tensiones políticas entre los gobiernos de Argentina y Venezuela, muchos venezolanos aprecian la calidez con la que son recibidos en el país.
