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Protege DIF estatal a 30 niños migrantes.

Alrededor de treinta niñas, niños y adolescentes (NNA) en situación de movilidad están bajo la protección del DIF Estatal, en espera de que el Instituto Nacional de Migración (INM) realice las gestiones necesarias para que puedan reunirse con sus padres.

Karina Armendáriz, vocera del DIF estatal, indicó que el número exacto de NNA bajo custodia temporal en esta frontera es inferior a 30. Sin embargo, señaló que los procedimientos legales a cargo del INM avanzan con lentitud, lo que prolonga la estancia de los menores en instalaciones públicas, retrasando su reunión con sus familias.

El abogado migratorio Jorge Vázquez Campbell criticó la lentitud de estos trámites, atribuyéndola a la desorganización dentro de la Oficina de Representación del INM. «Es una dilación negligente que perjudica a los menores», afirmó.

Funcionarios migratorios explicaron que en este proceso participan tres entidades: el INM, la Subprocuraduría de Protección a Niñas, Niños y Adolescentes (SPNNA) y los consulados de los países de origen de los NNA. El INM se encarga de coordinar con los consulados para que gestionen la recepción asistida de los menores en sus países de origen y su posterior entrega a sus padres.

El personal del DIF estatal mencionó que «el tiempo del trámite es variable», por lo que los NNA permanecen bajo su cuidado hasta que su situación jurídica se resuelva. Durante este tiempo, se les proporciona todo lo necesario, como parte de la atención que se brinda tanto a menores extranjeros como a nacionales no acompañados.

El DIF Estatal actúa conforme a la Ley de Migración, asegurando en todo momento el cumplimiento de las medidas de protección necesarias. En esta frontera, un elevado porcentaje de menores migrantes es localizado y protegido, evitando que su integridad se vea comprometida. De inmediato son ubicados en entornos seguros y se les facilita su retorno con sus familias o, en su defecto, se les aloja en un Centro de Asistencia Social (CAS) donde reciben atención.

Durante su estancia, que puede extenderse hasta cuatro meses, los menores reciben alojamiento, alimentación, asistencia psicológica, y participan en actividades educativas y recreativas que hacen más llevadera su espera. En el caso de menores nacionales no acompañados, el DIF Estatal, en coordinación con sus homólogos en otras partes del país, garantiza un retorno asistido eficaz, siempre considerando su vulnerabilidad y las razones que motivaron su migración.

Armendáriz reiteró que el DIF Estatal continuará resguardando a los menores el tiempo que sea necesario, hasta que el INM concluya los trámites correspondientes.

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